La aplicación de Plasma Rico en Plaquetas (PRP) es una práctica terapéutica regenerativa mediante la cual se logra reparar, reprogramar y rejuvenecer tejidos. Aplicado a la medicina reproductiva, el PRP ofrece beneficios significantes y sin efectos secundarios, ya que se obtiene como un auto medicamento mediante centrifugación de la propia sangre de la paciente.
Tras un minucioso proceso, se separan de la sangre el plasma con alta concentración en plaquetas y otros agentes plasmáticos ricos en Factores de Crecimiento (FC). Una vez liberados y activados estos FC, se aplican en el útero mediante diferentes técnicas de instilación.
De esta forma, a través de efectos endocrinos y paracrinos, se logra una eficiente regeneración y reparación del tejido subendometrial, sin provocar respuesta inflamatoria. Como resultado, se consigue mantener un endometrio más sano y reconstituido durante varios meses.