En reproducción asistida se puede elegir el sexo del bebé. Tomar anticonceptivos afecta a la fertilidad. Quedarse embarazada es fácil… ¿Te suena alguno de estos mitos sobre fertilidad? Para combatir la desinformación, desde la clínica de reproducción asistida IVF-Life hemos querido aclarar estos mitos que todos hemos escuchado en alguna que otra ocasión.
Los mitos, aquellas creencias nunca comprobadas, que circulan como si fuesen la verdad. Con motivo del mes de la infertilidad, desde IVF-Life hemos recopilado los mitos más frecuentes.
Desmontando mitos sobre fertilidad: Quedarse embarazada es fácil
Si llevas un tiempo intentado quedarte embarazada, probablemente te resulte increíble escuchar lo fácil que ha sido para el resto de personas conseguir el embarazo. La biología nos dice que se trata de un proceso complejo en el que intervienen numerosos factores (femeninos, masculinos e incluso algunos factores desconocidos).
Para las parejas que no presentan problemas de fertilidad la probabilidad de conseguir el embarazo ronda el 20% en cada ciclo ovulatorio. Además, puesto que la fertilidad desciende con la edad, más allá de los 37 años las posibilidades de concebir un bebé se reducen al 10%. Pasados los 40 años las opciones de una mujer de tener un embarazo son del 1%. De hecho, en nuestras clínicas del grupo IVF-Life, a día de hoy, el factor edad materna está presente en el 70% de las parejas que acuden a nuestros centros de fertilidad.
Nuestro consejo como profesionales de la medicina reproductiva es recomendarte que si llevas más de un año intentando quedarte embarazada sin protección o 6 meses si eres mayor de 35, consultes a un especialista en reproducción asistida que te guíe en tu camino hacia la maternidad.
Uno de los mitos sobre fertilidad más conocidos: Tomar anticonceptivos provoca infertilidad
La toma de anticonceptivos hormonales prolongada no tiene un impacto real sobre la fertilidad. Numerosos estudios concluyen que no existen diferencias reales en las tasas de embarazo de mujeres que han tomado la píldora y aquellas que no lo hicieron.
Existen algunos casos en los que se produce amenorrea post-píldora. Esto sucede cuando, al abandonar los anticonceptivos, la menstruación no vuelve de inmediato. Esta situación se soluciona habitualmente de manera espontánea en los siguientes ciclos.
La infertilidad suele ser femenina
Nada más alejado de la realidad. Según las estadísticas, el factor masculino engloba el 40% de los casos de infertilidad, otro 40%, es debido a causas femeninas. En el 10% de los casos encontramos una combinación de ambos factores y el restante 10% responde a motivos actualmente desconocidos. Entonces que la infertilidad suele ser femenina es un mito sobre fertilidad.
Cierto es que, más allá de los 35 años, la reserva ovárica se reduce considerablemente, mientras que el varón tiene un margen más amplio para reproducirse y no se tienen datos del momento exacto en el que desciende su capacidad reproductiva.
Cuando te relajes te quedarás embarazada
No hay nada más odiado por las mujeres que están en tratamiento de fertilidad que oír las repetidas palabras: “si te relajaras, conseguirías el embarazo”. Ese comentario aumenta el sentimiento de culpabilidad que se origina cuando no conseguimos algo que para otros es natural. Sin embargo debemos aclarar que no es del todo un mito sobre fertilidad.
Existen estudios que sostienen que un elevado nivel de estrés puede provocar desajustes hormonales que influyan en la ovulación. No obstante, el nivel de estrés para que esto suceda debe ser muy elevado.
Si ya has tenido hijos no puedes tener problemas de fertilidad
Aunque todo indica que, si lo has conseguido una vez, deberías poder volver a quedarte embarazada sin problemas, lo cierto es que existe lo que se conoce como infertilidad secundaria.
Los motivos de infertilidad secundaria pueden ser los mismos que en la infertilidad primaria: ovulación, hormonales, causa tubárica, causas genéticas, etc. A estos se les puede sumar el factor de la edad tras el primer embarazo.
Por otro lado, también pueden aparecer problemas asociados con esta primera gestación, como la diabetes o las adherencias pélvicas.
Ciertas posturas ayudan a quedarte embarazada: el mito sobre fertilidad que conocen todas las familias
Mucho se ha hablado de que determinadas posturas sexuales o post-sexuales favorecen el embarazo, como es el caso de la archiconocida: eleva las piernas y la gravedad hará el resto. Lamentablemente, no hay base científica que apoye dicha teoría.
El proceso reproductivo se inicia de forma autónoma cuando el semen llega a la vagina, sin que la gravedad tenga nada que ver. De hecho, la textura del semen favorece que se adhiera a las paredes de la vagina. La cantidad que se desecha no tiene importancia y no disminuye las posibilidades de embarazo. Además, los espermatozoides son capaces de detectar la existencia de un ovocito, encaminándose hacia él. La naturaleza está preparada para la búsqueda de una nueva vida.
En las clínicas de fertilidad se puede elegir el sexo del bebé
Algunas mujeres o parejas que acuden a las clínicas de reproducción asistida plantean la posibilidad de elegir el sexo de su bebé. La respuesta que reciben es siempre la misma: técnicamente es posible seleccionar el sexo de los embriones que se transfieren al útero, pero la ley española de reproducción asistida solo permite hacerlo por razones estrictamente médicas.
En este sentido, la legislación española solo permite seleccionar embriones masculinos o femeninos cuando el objetivo es prevenir una patología grave. Y solo se puede hacer con la aprobación, caso por caso, de la Comisión Nacional de Reproducción Asistida. Se trata, fundamentalmente, de enfermedades ligadas a los cromosomas sexuales.
Si sangras después de una transferencia el tratamiento no ha funcionado
El sangrado después de una transferencia embrionaria puede ser motivo de angustia y de estrés para quien ansía tener un bebé, ya que puede llegar a confundirse con el inicio del siguiente periodo.
Lo cierto es que durante las primeras semanas de gestación el útero está muy irrigado. Cuando el embrión se adhiere al endometrio, que se ha engrosado para recibir al embrión, se pueden romper algunos vasos sanguíneos dando lugar a un leve sangrado vaginal y es lo que comúnmente se conoce como sangrado de implantación.
No todas las embarazadas presentan sangrado de implantación y, si lo han tenido, no tiene porqué repetirse en todos sus embarazos.
Puedes leer más sobre el sangrado de implantación pinchando aquí
Fertilidad y mitos: Hay menos probabilidad de embarazo con un embrión congelado
Si se utiliza la técnica de la criopreservación, los embriones congelados son tan efectivos como los frescos en la búsqueda del embarazo tras un tratamiento de fertilidad.
Para la mayoría de los pacientes, la criopreservación de embriones supone una gran tranquilidad, ya que evita tener que volver a pasar por todo un tratamiento de reproducción asistida. Sin embargo, muchas parejas en tratamiento se plantean dudas con respecto a estos embriones criopreservados.
En primer lugar, la técnica de vitrificación no afecta a la calidad del embrión. Para valorarla principal diferencia entre un embrión fresco y uno vitrificado, debemos atender a criterios como la viabilidad del propio embrión y, para ello, debemos remontarnos al proceso inicial de selección .embrionaria.
Además, los embriones pueden sobrevivir congelados en nitrógeno líquido durante un período indefinido de tiempo. Han nacido bebés de embriones congelados hace más de 20 años.
Si llevas un tiempo intentado quedarte embarazada, te resultará increíble escuchar lo rápido que ha sido para el resto de mujeres y parejas conseguir el embarazo. Para esto, para combatir la desinformación, para romper con los tabúes y los mitos sobre fertilidad que existen en la sociedad, hemos creado esta sorprendente campaña de concienciación. Con el lema #FertilidadSinFiltros contamos lo que nadie ve durante un tratamiento de fertilidad.
Porque el camino hasta conseguir el embarazo, a veces, es más duro de lo que se esperaba.
Existen miles de historias sobre reproducción asistida, buenas y malas, pero cada una es única. Aquí te dejamos alguno de los testimonios de dos valientes mujeres que confiaron en nosotros.